¿Quién no ha soñado con vivir frente al mar y pasar un eterno verano?

Gracias al estilo mediterráneo esto es posible. Caracterizado por un espacio iluminado junto a la mezcla de tonos azules y marrones, aportan un aire fresco y alegre al ambiente. Sin embargo, no solo se trata de un estilo decorativo, este se abrió paso hasta convertirse hoy en día en un estilo de vida, donde el sol, mar y buen tiempo son los protagonistas.
La decoración que aplica este estilo, se ha convertido en una de las más populares y atractivas; este estilo transmite un entorno cálido y relajado, inspirado en ciudades que, precisamente bordean el mar Mediterráneo, tal como Ibiza o Santorini, donde las casas disfrutan del sol y la vista del mar.
Por eso, los espacios decorados con este estilo destacan por el uso de muebles de madera con acabados naturales, todo bajo un toque minimalista y bohemio.

Las casas que la utilizan permiten que el interior se conecte con lo que haya afuera, ya sea a través de las ventanas, terrazas o patios, considerando que son los espacios por donde la luz ingresa. Estos ambientes resaltan también por el valor a lo artesanal, encontrándonos con piezas únicas como un menaje de antaño o un tocador antiguo de madera tallada, artículos que validan la personalidad relajada del hogar.

Asimismo, se observa que el blanco es el rey en las casas con este estilo, acaparando prácticamente la totalidad de las paredes con la finalidad de dar paso a los rayos de sol e iluminar aún más el lugar, junto a los muebles, cuadros, cojines y demás artículos en azul, verde o tonos tierra, nos dan esa calidez e idea de unas vacaciones paradisíacas.

Te presentamos las características generales asociadas a este estilo:

COLORES: Como ya hemos mencionado, lo natural y el mar es clave para este estilo, por lo que sus colores suelen ser cálidos, pero también vibrantes, utilizando tonos como el azul, verde olivo, terracota, amarillo y blanco

MATERIALES NATURALES: Los materiales naturales son fundamentales, como es la piedra, barro y madera, estos reflejan la conexión que se logra con el medio, ayudando también a crear un ambiente acogedor, como por ejemplo, un suelo de terracota o baldosas cerámicas son algunos de los materiales más utilizados, al igual que las paredes en piedra o estuco.

ARQUITECTURA: Entre los elementos arquitectónicos, tenemos los arcos y bóvedas que
reflejan la influencia de las regiones costeras, apareciendo en pasillos, patios, entradas y ventanas, aportando también un toque de elegancia y sofisticación al diseño.

DETALLES ORNAMENTADOS:Los ornamentos están cargados de arte en la decoración que aplica este estilo, manifestado, por ejemplo, en azulejos pintados a mano, cerámicas decorativas, mosaicos y artículos de hierro forjado, son algunas de las muestras que nos regalan belleza y carácter a este estilo.

Ahora, te damos algunos tips para decorar tu espacio con este lindo estilo.

• Utiliza el mismo tono del suelo para unificar espacios.
• Opta por alfombras tejidas en materiales naturales y tonos cálidos.
• Elige tonos blancos o en su debido caso beige para las paredes.
• Para los acabados, considera artículos como piedras naturales, muebles de madera sin pulir, bambú o cemento.
• Incorpora materiales rústicos y naturales como paja, yute, lino o algodón.
• Resalta la arquitectura, añade textura como piedras sin tallar, vigas de madera o azulejos.
• Aprovecha la iluminación natural con ventanas descubiertas y cortinas en tonos claros traslúcidas.

Definitivamente, el estilo mediterráneo trae consigo un respiro para todos, permitiéndonos relajarnos, despreocuparnos por mantener a raya cada cosa en su lugar, por el contrario, nos enseña a valorar las texturas, lo artesanal, natural y tosco de alguna forma, encontrando belleza en una arruga, en un sombrero de paja o una piedra.