El estudio de arquitectura, diseño y construcción, Rem3 Arquitectos, nos comparte el proyecto SOTO VALLE, un proyecto que nació mediante una iniciativa que crearon durante la pandemia y logró ser ejecutado al terminar el confinamiento.
Rem3 Arquitectos es un estudio de arquitectura, diseño y construcción fundado el 2011 en Lima, Perú, por el Arquitecto Marco Núñez-Melgar Vega. En sus inicios abarcaban un gran abanico de tipologías, en los que destacaban la elaboración de almacenes metálicos para empresas como la cervecería Backus. Luego de unos años encontrarían su verdadera pasión en el desarrollo de proyectos comerciales y residenciales, donde la relación con el usuario final es mucho mas íntima y el impacto hacia las masas puede resultar motivador.

Es en este nicho donde se desarrollan actualmente, elaborando proyectos de viviendas, oficinas y locales comerciales. Su meta es crear espacios “personales” que hablen con nombre y apellido de una familia o una marca, involucrando a los clientes en el hermoso proceso de diseño y construcción, compartiendo experiencias y creando un equipo. Sus proyectos nacen cuando son habitados y viven a través de los ojos de sus usuarios.

Soto Valle

Soto Valle marca un antes y un después en la forma de comunicar nuestros proyectos con el mundo. Es el feliz desenlace de una etapa difícil para todos y es la muestra clara de que la actitud, perseverancia y cariño por lo que hacemos tiene frutos. Luego de quedar recluidos, producto de la pandemia, y al ver que los planes de todos se veían truncados, en Rem3 Arquitectos decidimos crear AUF (Arquitectos unidos por el futuro) donde junto a estudios como 120 grados, Aformal y Weis Coello arquitectos, desarrollamos distintas propuestas en el ámbito residencial, el transporte y la vía publica para generar conciencia y mitigar la ola de contagios.

Es en este contexto que en la interna creamos asesorías gratuitas para todas las personas que tenían proyectos en mente y la crisis los había hecho parar, nos comenta Rem3 Arquitectos.

Clientes

Mapi y Fernando habían comprado un departamento de 123 m2 con 30 años de antigüedad en la calle Soto Valle en Magdalena, la diferencia de precios entre los departamentos de estreno en la zona y el suyo, les permitía invertir en la remodelación total del departamento para dejarlo exactamente como ellos querían. Durante la asesoría los ayudamos evaluando el inmueble y proponiendo la forma en la que se podría obtener un baño adicional, ampliar la cocina y aprovechar un espacio para el dormitorio de Gabo. La asesoría nos permitió conocernos y con la química nació la elaboración del expediente de diseño.

Todo el proceso fue durante la etapa de confinamiento y cuando al fin nos permitieron salir a trabajar empezamos con la ejecución. Soto Valle fue la primera obra realizada durante la pandemia, la primera obra en la que compartimos nuestros procesos, experiencias, errores y aciertos en las redes sociales y el que nos permitió
crear una linda comunidad que crece día a día.
Desde el inicio nuestra inspiración fueron las imágenes que Fernando y Mapi tenían sobre la forma de vivir en su nueva casa. Sus reuniones familiares en torno a la parrilla, Gabo corriendo hacia su jardín listo para jugar con el balón y con su cuarto preparado para recibir a sus primos y amigos. A nivel de estilo, Mapi la tenía muy clara; teníamos que lograr un espacio moderno, elegante pero muy acogedor con el color gris como paleta principal y una gran cantidad de mosaicos que lo mezclen con un espacio más clásico.

Al ser un departamento pequeño las mayores expectativas se centraron en las áreas sociales: sala/comedor/terraza eran los lugares donde la familia estaría junta y cobraba un mayor valor, sin embargo, cada espacio de la vivienda se diseñó a profundidad sin dejar nada suelto.

Diseño

En general la vivienda es un juego de tonos grises que incorporan el color a través de los mosaicos o algunos elementos decorativos y se hacen acogedores por la incorporación de acabados en madera o con apariencia de madera salvo algunas excepciones: Los baños tienen un estilo muy neoyorquino con sus bricks blancos, mosaicos y perfilería metálica; el dormitorio principal es un espacio de descanso, sin ningún contraste que desvíe la mirada, un espacio tranquilo y elegante de puntos dorados; el dormitorio de gabo es el espacio atrevido y divertido con muebles de color, acabados en madera y formas circulares que lo vuelven un espacio lúdico; la cocina es un espacio funcional pero elegante, con toques de madera y accesorios en negros y dorados; la sala/comedor es un espacio elegante con toques industriales y muchos detalles de iluminación artificial que aportan sensaciones distintas durante el día y la noche; la terraza es un lugar con texturas y contrastes con un piso de mosaicos que recuerdan una casona limeña y volumetrías limpias donde se crea el principal espacio de reunión.

A nivel de arquitectura el principal reto fueron las áreas de servicio. El departamento contaba con un solo baño compartido y una lavandería contigua a la cocina, que restaba espacio y ensuciaba la vista. Conseguimos incorporar un nuevo baño privado para el dormitorio principal, ampliar la cocina, crear una barra de desayunador y ocultar la lavandería dentro
del mobiliario.

Apreciación Final

Soto Valle es nuestra primera obra durante la pandemia, un nuevo reto en relación a cuidados, tiempos y costos; nació de una iniciativa para ayudar a las personas a retomar sus proyectos y con esto el ánimo que tanto se había perdido.
Fue el primer proyecto construido de uno de los miembros del equipo y la primera obra transmitida día a día por las redes sociales. Es el inicio de una linda amistad con Fernando, Mapi y Gabo que comparten con nosotros las mil y una aventuras que hoy viven en su nuevo hogar.