Ignacio Martínez Argüello

Ignacio Martínez Argüello, distinguido diseñador de interiores, nos comenta un poco sobre su incursión en el mundo del diseño, contándonos todo acerca de su experiencia profesional, sus inicios, su relación con los clientes, su estilo y también nos brinda sabios consejos para los futuros profesionales del rubro.

1.- Cuéntanos un poco sobre tu experiencia profesional

Hace más de 10 años que estoy en esto y puedo decir que el trabajo de un diseñador es diferente todo el tiempo. En mis comienzos me especialicé en oficinas donde el arte era un elemento importantísimo y diferencial. En el camino también he trabajado en difundir mi visión, escribiendo y produciendo para revistas donde poder compartir conocimiento, ideas y dejar volar la imaginación.
En el mundo residencial las reglas del juego son otras. El contacto directo con los usuarios entrena a uno para encontrar ese nivel de funcionalidad y comodidad necesario. Ya no es una cuestión estética.

2.- ¿Cómo te diste cuenta de que te querías dedicar a esto?

Siempre me interesó el tema. De chico mi pasatiempo era dibujar y armar muebles con lo que tuviera a mano. Amaba ir a museos y contemplar las obras más coloridas. Esa fantástica búsqueda por lo estético es lo que me llevó a considerar la profesión y lo que me motiva en cada proyecto.

3.- ¿Cómo fue el proceso de emprender y crear tu estudio de diseño de interiores?

Creo que hoy la palabra “emprender” ha tomado nuevos significados. Aunque yo no me veo como un “emprendedor”, sino como un artista que busca la belleza y la armonía en los espacios para así vivir de mejor manera.

4.- Al momento de crear tu estudio, ¿A qué dificultades o retos te enfrentaste? ¿Cómo los solucionaste?

Nuestro objetivo es diseñar y proyectar los espacios que nuestros clientes sueñan. Buscamos siempre empatizar con sus necesidades brindándoles soluciones innovadoras que impacten de manera positiva en su calidad de vida.

5.- ¿Qué servicios brindan? ¿Cuáles son las metas que tienes para tu estudio? ¿Cómo te ves en el futuro?

Como mencionaba antes, he realizado todo tipo de obras, siendo las creativas las que más disfruto. A futuro veo desarrollando más mi rol de taste maker, enseñando una forma de vida más relajada y verdadera.

6.- ¿Cuáles son tus tendencias favoritas en diseño y decoración?

A veces confundimos moda por tendencia. Para mí, una tendencia es un cambio de comportamiento como fenómeno social y su permanencia es estable, en cambio las modas son pasajeras y superficiales.
Si tuviera que etiquetarme, creo que el eclecticismo como tal es democrático y refleja la pluralidad de culturas que nos compone. Nos hace únicos y verdaderos.

7.- ¿Cuáles consideras que son las tendencias y proyectos más solicitados por los clientes?

Sin encasillarme en un estilo definido, creo que todos mis trabajos cuentan con algo cómodo, colorido y con arte como forma de expresar nuestra personalidad. Tengo la suerte de tener clientes que se identifican con eso y buscan atemporalidad y una sobria elegancia.

8.- ¿Cómo es la relación que llevas con los clientes? ¿De qué manera consideras que deben ser asesorados para ayudarlos a definir un estilo?

La relación con tus clientes debe ser cercana. Se trata de una elección mutua donde se intercambian ideas, miedos y alegrías todos los días mientras dure el proyecto. Es muy importante ser honesto y transparente.
En relación a estilos, creo que quién contrata un servicio debe tener una idea de lo que le gusta y no le gusta, a partir de eso buscamos que es cómodo, funcional y los hará felices. No necesita ser más complicado.


9.- ¿Qué recomendaciones tienes para los recién egresados de diseño de interiores?

Estudiar, estudiar & estudiar más! Somos muchos y la competencia es grande. Hay que nuclearse con colegas, conocer sobre nuestros ídolos de este mundo, abrir los ojos a la naturaleza, absorber conocimiento, y por sobre todo desafiarse.

10.- ¿Qué recomendaciones tienes para los profesionales que quieren abrir su propio estudio?

Para abrir un estudio se necesita paciencia, constancia y profesionalismo. Avanzar a pasos lentos sigue siendo ir para adelante. Lo importante es hacerlo bien. El éxito no se mide por metros cuadrados y honorarios mejor cobrados. Los profesionales más felices son los más apasionados porque disfrutan de lo que hacen.

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